Google
 

viernes, 30 de mayo de 2008

Niños obesos ¿adultos obesos?


Muchos padres tienen la obsesión de ver a sus niños gorditos y para ello los rellenan de comida. Otros, en cambio, no cuidan la alimentación de sus hijos y los dejan comer cualquier cosa. La doctora Ruth Kindel Dubois señala que en los últimos años con los cambios alimentarios y con el hecho que la madre debe salir a trabajar, se ha transformado la conducta alimentaria con lo que la prevalencia de obesidad es bastante alta. Esto se vio primero en los países desarrollados pero se trasladó a nuestro medio en donde un 15% de los niños son candidatos a ser obesos y probable pacientes diabéticos.

Los patrones culturales de antaño señalaban que un bebé gordito era un bebé saludable. Los estudios actuales señalan que estos niños pueden desarrollar enfermedades cardio vasculares, diabetes, hipertensión arterial y otras que les restan calidad de vida a las personas adultas.

Un niño no debe de comer menos si es que está acostumbrado a comer. Lo que hay que hacer es cambiar sus hábitos alimentarios. Es sorprendente cómo esta ansiedad por comer va disminuyendo o se suple con otros tipos de alimentos. Las grasas de la llamada comida chatarra están asociadas con una mayor avidez y un afecto de deterioro para la salud. "En nuestro plan nutricional recomendamos el consumo de frutas, verduras y fibra como la avena", señala la especialista.

Los niños pequeños que van al colegio comen más veces que los adultos. Sus comidas deben tener carbohidratos, proteínas y las grasas en mínima cantidad. Una dieta balanceada es aquella que tiene un promedio de 10 a 15% de proteína, un 50% de carbohidratos y un 35% de grasas que deben ser ricas en ácidos grasos esenciales que son los famosos omega y abundante fibra. En la merienda que consume el niño debe haber siempre un aporte proteico que ayudará que estas calorías que están ingresando también sean consumidas al metabolizarse estas proteínas.

No hay comentarios:

Google