El primer vicepresidente del Parlamento Andino, Wilbert Bendezú, expresó su enérgica protesta ante la Municipalidad de Madrid por la agresión racista que la peruana Carolina Rospigliosi, de 44 años, sufrió el 12 de septiembre en el Metro de la capital española.
Rospigliosi se aprestaba a realizar un trasbordo cuando supervisores del conocido medio de transporte le solicitaron la tarjeta que la autoriza a viajar. Al revisar el pase, los agentes de seguridad habrían constatado la caducidad del mismo.
Los supervisores, sin autoridad alguna, le pidieron a la mujer su documento de identidad. Ella indicó que se lo entregaría a la policía.
"Eres una sucada ignorante, vete a tu país, que vienes aquí a robarnos el trabajo", recibió como respuesta Rospigliosi.
La peruana fotografió a los empleados del Metro pero inmediatamente dos agentes de seguridad la inmovilizaron torciéndole ambos brazos, mientras que una supervisora procedió a quitarle el teléfono móvil.
Luego la subieron a la entrada de la estación y le propusieron que abandonase el lugar. Ella se negó hasta que habló por teléfono con una amiga.
"No me dejaban coger el móvil. Marcaron ellos y me pusieron el teléfono en la oreja para hablar. Mi amiga avisó a la policía y me pude ir con mi teléfono después de borrar la foto", relató Rospigliosi, quien denunció la agresión en la comisaría de Carabanchel.
Bendezú precisó que el Parlamento Andino Capítulo Perú se ha puesto en contacto con el Consulado del Perú en Madrid, a fin de que la Rospigliosi reciba el respaldo y asesoramiento del caso.
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